Los Abrigos del Pozo, más conocida como cueva de los monigotes, nombre dado por los antiguos pastores debido a los dibujos representados en las paredes de la cueva, están situados en la vertiente Noroeste de la Sierra del Molino (Calasparra), se encuentran al pie de un escalón rocoso del cañón de Almadenes, en la margen derecha del río Segura, 4 metros sobre el nivel medio del río.
El abrigo ofrece unas excelentes condiciones de habitabilidad. Tiene 30 metros de largo, 9 metros de profundidad y 4 metros de altura, con una superficie total de 283m2, de la que tan solo se ha excavado un 8%.
Hace 8000 años, los grupos epipaleolíticos comenzaron a habitar este abrigo abasteciéndose de los recursos naturales del entorno para alimentarse, recolectando frutos, pescando en el río y cazando conejos, cabras y aves. Recogían ramas de pino para prender fuego, calentarse o cocinar alimentos. Tallaban herramientas cortantes de sílex y cuarcita y se adornaban con conchas marinas, fruto del intercambio con otros grupos costeros.
El arte rupestre, junto con la dilatada ocupación del abrigo, es el aspecto más relevante de este yacimiento arqueológico.
Las pinturas esquemáticas de color rojo se distribuyen con un total de 40 motivos, entre esquematizaciones humanas, representaciones animales y otros signos de difícil interpretación
(notas extraídas de los paneles informativos).
La entrada a la cavidad sólo se realiza en rutas organizadas a través del ayuntamiento y también puede hacerse contratando el descenso del cañón en balsas, organizado por empresas de turismo activo, las cuales realizan una parada en la cueva de los monigotes. Ver el documento descenso del cañón de Almadenes