A principios del Siglo XX,
Águilas era un pueblo próspero con una economía basada en la exportación de hierro a Gran Bretaña. Esta actividad daba lugar a un incesante flujo de portes así como a varias líneas marítimas que situaban a Águilas como uno de los principales lugares de la Región de Murcia, lo que dio lugar a un ambiente propicio para fomentar la convivencia y la cultura. El máximo exponente de aquel esplendor son "El Casino" y el "Círculo de Artes y Comercio".
Construido entre 1.894 y 1.895, el Casino es un edificio de dos plantas y fachada noble cuyo atractivo le ha valido su inclusión en el registro de bienes históricos de interés cultural de España.