De Cabo Cope en Águilas hasta la playa de Calnegre en Lorca hay casi una treintena de calas para disfrutar de un relajante y silencioso baño, en zonas poco frecuentadas y de aguas muy transparentes. Playas para apreciar la música de las olas en su continuo ir y venir. Pequeñas calas de suave arena protegidas por las impresionantes bóvedas que la erosión natural ha moldeado en las rocas.
La Ensenada de la Fuente, Sombrerico, Rafal, Playa de la Galera, en la zona de Águilas o Cala Blanca, Cala Honda en la zona de Lorca, entre otras. Por toda esta ruta hallarás otras tantas pequeñas agrupaciones de roca y arena donde darte un magnífico baño en un mar azul y relajante.
El acceso a todas estas calas y playas es al principio por carretera asfaltada junto a una gran duna fósil que parte de Torre de Cope y después por un camino de tierra que también sigue paralelo a la costa. Muy bonito para realizarlo andando, en bicicleta o en coche y la contemplación de sus calas y naturaleza totalmente virgen no te dejarán indiferente
Desde la playa del Ciscar o de Baja Mar donde en sus proximidades hay un viejo y abandonado cuartel de la Guardia Civil el camino se interrumpe para los vehículos hasta Cala Honda, siendo este tramo el único que no puedes hacer en vehículo para conocer todas estas calas.